sábado, 15 de marzo de 2008

Pájaros perdidos

*Eduardo Galeano

Los presos políticos uruguayos no pueden hablar sin permiso, silbar, sonreír, cantar, caminar rápido ni saludar a otro preso.

Tampoco pueden dibujar ni recibir dibujos de mujeres embarazadas, parejas, mariposas, estrellas ni pájaros.

Didaskó Perez, maestro de escuela, torturado y preso por tener ideas ideológicas, recibe un domingo la vista de su hija Milay, de cinco años.

La hija le trae un dibujo de pájaros. Los censores se lo rompen a la entrada de la cárcel.

Al domingo siguiente, Milay le trae un dibujo de árboles.

Los árboles no están prohibidos, y el dibujo pasa.

Didaskó le elogia la obra y le pregunta por los circulitos de colores que aparecen en las copas de los árboles, muchos pequeños círculos entre las ramas.

- ¿Son naranjas? ¿Qué frutas son?
La niña lo hace callar.
-Shhhhhhhh.
Y en secreto le explica:
-Bobo, ¿no ves que son los ojos? Los ojos de los pájaros que te traje a escondidas.




24 de marzo: 32 aniversario de la dictadura militar argentina más sangrienta.

1 comentario:

Franco Mar dijo...

copado el relato ese de los pajaros, los niños siempre acertando y viendo lo q los grandes no pueden.

Amiga! me voy al campo para semana santa unos días suert en esta semana chanta ;)...


Arte de la semana...(Quino)

Arte de la semana...(Quino)